«Rajoy representa inmovilismo y desigualdad»
Hoy quien tiene que explicar qué proyecto tiene para España es Rajoy, y todavía no lo conocemos porque el líder de los conservadores forma parte del pasado y representa el inmovilismo, ironizó.
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ratificó hoy su voluntad de formar un nuevo gobierno en alianza con otras fuerzas políticas, pero nunca la gran coalición propuesta por el presidente del Ejecutivo saliente, Mariano Rajoy.
En una reunión de las Juventudes Socialistas, el secretario de Organización del PSOE, César Luena, criticó la insistencia del conservador Partido Popular (PP) en proponer esa "especie de abrazo del oso" que simboliza un eventual pacto entre ambas agrupaciones.
No puede existir una coalición que suponga acabar con las expectativas de la sociedad española, remarcó Luena en alusión a los resultados de las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, que dejaron el parlamento más plural de la democracia.
Nunca participaremos en el fraude que significa apoyar y participar en un ejecutivo con el PP, remarcó el dirigente, luego de emplazar a Rajoy a "salir de la siesta" y esclarecer ante la ciudadanía cuál es su plan para el país.
Hoy quien tiene que explicar qué proyecto tiene para España es Rajoy, y todavía no lo conocemos porque el líder de los conservadores forma parte del pasado y representa el inmovilismo, ironizó.
Lamentó que el jefe del Ejecutivo en funciones esté en un cálculo de superviviente tras los comicios de diciembre, en los que el PP obtuvo la mayor cantidad de votos pero sin conseguir la mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados, establecida en 176 escaños.
Según Luena, en esa cita con las urnas, los españoles se pronunciaron de forma mayoritaria por el inicio de una nueva etapa en la que prime el diálogo, la cultura de pactos, la pluralidad y las reformas en un sentido progresista.
Destacó la reapertura de la causa por la destrucción de los discos duros de las dos computadoras del extesorero del PP Luis Bárcenas, decidida ayer por la Audiencia Provincial de Madrid, debido a que se archivó sin practicar ninguna diligencia.
En 2013, Bárcenas confesó que esos ordenadores contenían la información original de los supuestos sobresueldos y donaciones ilegales recibidas durante años, foco del mayor escándalo de corrupción dentro de las filas conservadoras.
"Pueden romper la memoria del disco duro, pero no la memoria de los españoles", advirtió Luena, quien denunció la falta de explicaciones contundentes por parte del PP ante esas irregularidades.
