Bolivia crea Consejo para defender soberanía sobre aguas del manantial Silala

El Gobierno boliviano creó este miércoles un Consejo de Defensa de la soberanía sobre las aguas del manantial Silala, ubicadas en el departamento de Potosí, en la región fronteriza con Chile.

 

"Hemos aprobado un decreto supremo es la creación del Consejo de Defensa de los manantiales del Silala y todos los recursos hídricos en frontera con la República de Chile", dijo el canciller David Choquehuanca, en rueda de prensa.

 

Explicó que este consejo, creado mediante decreto supremo, será un "órgano superior de coordinación" que estará liderado por el presidente Evo Morales, y en su ausencia por el vicepresidente Álvaro García Linera o el Ministro de Relaciones Exteriores.

 

Señaló que esta instancia estará conformada por el presidente, el vicepresidente, los ministros de Relaciones Exteriores, Defensa, Gobierno, Transparencia, Aguas y el procurador, refiere la Agencia Boliviana de Información (ABI).

 

Asimismo, Choquehuanca anunció que en los siguientes días se anunciará el nombre del secretario del consejo.

 

Las aguas del Silala nacen en territorio boliviano andino y abastecen sin contraprestación alguna hace más de 100 años a varias ciudades del norte de Chile y debido a un tratado de derecho privado, el curso de agua fue conducido al norte chileno por un sistema de acueductos artificial.

 

En marzo pasado, el Gobierno de Bolivia decidió acudir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para demandar a Chile por el uso ilegal del Silala, lo cual constituye la segunda demanda contra Chile después de la presentada en 2013 a fin de lograr una salida soberana al mar, tema en el que el tribunal se declaró competente para atender la reivindicación.

 

No obstante, el mandatario de la nación suramericana alertó sobre la intención de algunos políticos de Chile de que su país renuncie al Pacto de Bogotá, luego de que Bolivia confirmó que acudirá a la CIJ para canalizar la demanda por las aguas del Silala.

 

El Pacto de Bogotá, también conocido como el Tratado Americano de Soluciones Pacíficas fue suscrito en abril de 1948 por los países independientes de América para imponer una obligación general a los signatarios de resolver sus conflictos a través de medios pacíficos.