Opinión

Visita de Maduro a China, un gran golpe a EEUU

La reciente visita del Presidente Maduro a China que se inscribe en el marco del Plan de Recuperación Económica que adelanta el gobierno venezolano fue otra magistral jugada del mandatario criollo sobre el tablero político-económico y geoestratégico que ha puesto en jaque los planes de Estados Unidos para derrocarlo y destruir la Revolución Bolivariana, el inédito y pacífico proyecto político e ideológico de Chávez.

Y es que el Imperio y sus lacayos, los gobernantes de Estados vasallos europeos y latinoamericanos que pensaban que con sus conjuras desestabilizadoras y sanciones político-económicas lo tenían acorralado, frustrados observan que tras la gira al gigante asiático, Maduro, el gobierno y pueblo venezolanos han salido más fortalecidos y confiados en el triunfo de su justa causa, que es la paz y el amor, opuestos al odio y la guerra que ellos promueven con sus acciones desestabilizadoras.

Un cable de la Agencia Venezolana de Noticias (AVN) al informar sobre los resultados de la histórica gira del Presidencial y su comitiva de expertos y asesores, destaca algunos datos de los 28 acuerdos suscritos , que según declaraciones del jefe del Estado venezolano "ratifican la relación multidimensional y expresa la diversidad e integridad del esfuerzo de los últimos 19 años".

En este sentido la nota señala que "como parte de la XVI Reunión Mixta de Alto Nivel China-Venezuela (CMAN) realizada el viernes en Beijing se suscribieron una serie de acuerdos de cooperación energética para incrementar la producción de hidrocarburos en la Faja Petrolífera del Orinoco, "Hugo Chávez" y potenciar las nuevas relaciones en materia gasífera".

"El Presidente Maduro, -destaca a continuación- que gracias a los acuerdos de la Comisión Mixta y a la sólida relación China-Venezuela, en los últimos 36 meses la Nación pudo enfrentar una serie de circunstancias como precios del barril de petróleo en 20$ y las sanciones económicas de EEUU y de la UE. Sin embargo hoy Venezuela está de pie, batallando y está en sus mejores circunstancias".

Todo ello, aunado al asesoramiento financiero que dará China a los planes económicos del gobierno, da una idea de la magistral jugada realizada sobre el tablero político-económico y geoestratégico por Maduro, que ha puesto en jaque los planes del Imperio y sus secuaces a esa misión imposible que es destruir la Revolución Bolivariana.

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