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Quinanoque, pueblo ancestral que edifica su permanencia (+Fotos)

El asentamiento de Quinanoque, ubicado en el municipio Sucre del estado Mérida, en la región andina de Venezuela, es una de varias comunidades originarias donde la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV) impulsa la construcción de 110 viviendas dignas.

La política habitacional del Estado venezolano, avanza en saldar la deuda histórica con las comunidades indígenas, en el entendido de que asistirlas, trasciende el mero registro de su existencia en la historia, para dignificar su presencia en este tiempo.

El Ministerio del poder popular para los Pueblos Indígenas encabeza este desarrollo habitacional de 110 viviendas dispersas en los municipios Sucre y Miranda, específicamente en las comunidades Quinanoque, Quinaroe, Guazábara, Orkas, Cases, Mucumbú y Timotes del estado.

Angélica Faría, representante por Mérida ante el Minpi, informó a la Agencia Venezolana de Noticias (AVN) que la inversión en el desarrollo, emprendidos entre 2014 y 2015, supera los Bs 45,6 millones.

Detalló que en Quinanoque se encuentra la mayor parte de un grupo de 30 viviendas próximas a ser culminadas. Están dispersas en ese asentamiento, así como en Quinaroe, Algría Alta, Cases, Mucumbú y Orkas.

"Esas treinta son las más avanzadas y queremos culminarlas antes de fin de año", puntualizó Faría, para añadir que actualmente se desarrolla la fase final de acabados con friso y pintura.

Gentilicio originario reivindicado en Revolución

Los Quinanoque escogen como caciques a los individuos de mayor edad, probidad y experiencia. Valoran la llamada tercera edad, como un atributo del cual tomar sabiduría y guía para sus acciones.

Es por esa razón, que en Quinanoque corresponde el estatus de cacique a Fenis Antonio Carrero, quien opina que la existencia de esa comunidad ancestral, ha sido visibilizada apenas en la reciente década.

"Para nosotros es un orgullo el que a través del Minpi, se nos haya tomado en cuenta. En ningún Gobierno anterior a la Revolución, habríamos adquirido una casa digna. Nosotros salimos del anonimato gracias a nuestro presidente, Hugo Chávez, quien nos incentivó y elevó al plano de inclusión que debemos tener", señala.

La siembra de caña, de maíz, de pimentón y de tomate, son las principales actividades económicas en Quinanoque, pero el procesamiento de harina de trigo en panaderías, la carpintería y la herrería, son oficios que han sido aprendidos paulatinamente por miembros de la etnia.

Los Quinanoque rinden culto a deidades asociadas a los elementos tierra, agua, fuego y aire. En el devenir de los años y del intercambio, adoptaron la veneración a San Isidro, cuyas fiestas patronales festeja el vecino pueblo de Lagunillas, los días 14 y 15 de mayo.

Esos días, en completo sincretismo, los Quinanoque acompañan la procesión y el festejo a San Isidro, pero en lo profundo de sus creencias, ellos veneran a la Laguna de Urao, un espejo de agua salobre, conformado en el presente como monumento natural de 29 hectáreas bajo protección.

Un toque ancestral y originario

Yuraima Márquez, madre de 40 años de edad, con dos hijos adolescentes, comparte el laborioso acabado de la nueva vivienda con su esposo, un curtido albañil Quinanoque.

La unidad habitacional de 72 metros cuadrados y tres habitaciones, fue construida de acuerdo al estándar de GMVV, pero incorpora adecuaciones propuestas por la comunidad siguiendo sus creencias.

Una de estas variantes, es la construcción del baño en el exterior y contiguo a la vivienda, detalle que a las familias resulta conveniente en términos energéticos y espirituales.

"Nos alegramos mucho por esta vivienda, teníamos mucho tiempo en una habitación, pero ahora se nos abrió la oportunidad de tener una casa digna a través de nuestro Ministerio", expresa Yuraima.

Octavio Rangel, promotor del Minpi en el municipio Sucre, asegura que el acompañamiento del Estado a los aborígenes del país, es un mandato de las leyes transformadoras impulsadas por la Revolución.

"Es la continuidad al trabajo para saldar la deuda histórica con los pueblos indígenas. Los Guazábara, Quinaroe, Quinanoque, Orkases, Mucumbús y Timotes suman unos 600 habitantes, y están siendo dignificados con sus viviendas. Es una política pública aplicada sin contratiempo", asegura.

La edificación de estas 110 viviendas, que se encuentran en diferentes fases de construcción, para dignificar a familias originarias, es un emprendimiento inédito en Mérida, que se suma al despliegue nacional del Minpi, para ubicar, diagnosticar y asistir a las comunidades indígenas en sus necesidades vitales.

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